En el corazón de Miami, donde convergen los sueños latinos y la innovación urbana, una tradición ha llegado a su fin. El Bosque Encantado, un parque navideño que durante años fue símbolo de esperanza y magia para miles de familias hispanohablantes, anunció su cierre definitivo en 2025, dejando un vacío que trasciende lo económico.
Este icónico espacio ubicado en Tropical Park no solo ofrecía un espectáculo de luces y fantasía, también conectaba a generaciones con una identidad cultural compartida. Su cierre evidencia las presiones económicas actuales en el sur de Florida, donde el aumento en los costos operativos, la inflación acumulada y una competencia cada vez más digital están transformando el panorama del entretenimiento local.
El Bosque Encantado y el alma emprendedora latina
Detrás del Bosque Encantado había una historia de emprendimiento familiar hispano, iniciada por cubanos en el exilio que encontraron en este proyecto una forma de preservar su cultura mientras fortalecían el tejido económico de la ciudad. A lo largo de los años, este parque generó empleos estacionales, promovió microempresas locales y fue un ejemplo del poder comunitario.
Por otro lado, el caso plantea una pregunta urgente: ¿cómo proteger espacios que son tanto negocios como pilares emocionales de una comunidad? Especialmente cuando se trata de Miami, donde el 70% de la población es hispana y la memoria colectiva se construye también desde la experiencia migrante.
Según cifras del condado de Miami-Dade, más de 400 eventos culturales organizados por la comunidad hispana tuvieron lugar entre agosto y noviembre de 2025, reafirmando la vitalidad de esta identidad, a pesar de los cierres.






