La energía en Sunrise, Florida, promete elevar la temperatura del hielo. Los Anaheim Ducks aterrizan con una ofensiva renovada y un impulso que los ha colocado entre los equipos más efectivos de la NHL, listos para medirse con los Florida Panthers, bicampeones de la Copa Stanley.
El equipo californiano, que no accede a los playoffs desde 2018, vive una etapa de reconstrucción estratégica que empieza a dar resultados. Con un promedio de 3.63 goles por partido, los Ducks se ubican en el quinto lugar de la liga, después de años de ocupar los últimos puestos en producción ofensiva.
El renacer ofensivo de Anaheim Ducks impulsa su regreso
Troy Terry, figura clave y actual líder de puntos junto a Leo Carlsson, resume el nuevo espíritu del equipo. “Estamos avanzando y construyendo algo importante”, señaló el delantero de 28 años, quien ya acumula nueve puntos y mantiene una racha goleadora en tres partidos consecutivos.
A su lado, el joven Beckett Sennecke, de solo 19 años, empieza a destacar con tres goles y dos asistencias en ocho juegos, confirmando el talento emergente que alimenta el futuro de Anaheim. La llegada del veterano entrenador Joel Quenneville, ganador de tres Copas Stanley, también ha inyectado una mentalidad ganadora que busca consolidarse.
Por otro lado, los Florida Panthers, potentes en defensa, atraviesan una fase complicada por las lesiones de sus estrellas Aleksander Barkov y Matthew Tkachuk. Sin embargo, el liderazgo del portero Sergei Bobrovsky, con una blanqueada reciente y un sólido promedio de 2.28 goles en contra, mantiene viva la confianza local.
El duelo en el Amerant Bank Arena enfrentará dos filosofías opuestas: la estructura sólida de los campeones y el ímpetu ofensivo de un equipo que busca regresar al protagonismo. En el fondo, ambos comparten la misma meta: construir sobre la adversidad y reinventarse en el hielo.






