La apertura de Del Mar Fort Lauderdale marca un nuevo capítulo para la gastronomía de Estados Unidos, con una propuesta que combina visión empresarial, diseño estratégico y una lectura precisa del mercado de lujo. La llegada del concepto al sur de Florida confirma cómo el crecimiento turístico impulsa innovaciones que transforman la experiencia culinaria en destinos costeros.
El restaurante se integra al complejo Auberge Beach Residences con una estructura amplia que supera los 17 mil pies cuadrados y que refuerza el potencial de Del Mar Fort Lauderdale para crear un punto de encuentro relevante en la escena local. Además, incorpora espacios interiores y exteriores, junto con cuatro salones privados que fortalecen su atractivo para eventos corporativos y sociales.
Del Mar Fort Lauderdale como propuesta mediterránea en expansión
El menú apuesta por una identidad mediterránea diseñada para compartir y construida a partir de sabores de Grecia, España, Italia y Marruecos. La carta incluye desde dips tradicionales hasta pescados frescos, platillos al grill y pasta elaborada en casa, un enfoque que refleja la ambición del concepto de posicionarse como referencia en cocina costera premium. También destacan los cócteles de autor y una selección de vinos servidos por copa, Coravin o botella, que amplía el rango de experiencias para los visitantes.
Por otro lado, el crecimiento del grupo Cameron Mitchell Restaurants refuerza el alcance nacional del proyecto. La compañía opera más de 50 restaurantes en Estados Unidos, y su presencia en Fort Lauderdale evidencia una estrategia que combina expansión y reconocimiento de oportunidades regionales.
Estrategia, demanda turística y evolución del mercado
El proyecto surge en un momento donde la actividad hotelera y el turismo de alto nivel sostienen una competencia más exigente en Fort Lauderdale Beach. En consecuencia, Del Mar Fort Lauderdale se establece como un actor que busca diferenciarse con producto, arquitectura y ubicación directa sobre la arena. La oferta del restaurante incluye además un despliegue de mariscos, carnes, cócteles y una terraza que aprovecha la vista al Atlántico para reforzar su propuesta de valor.
La ampliación del concepto se alinea con una tendencia nacional: en 2024, varias cadenas de hospitalidad reportaron un impulso de demanda en destinos costeros que combinan gastronomía, experiencia y bienestar. Esa dinámica explica por qué Del Mar representa una apuesta estratégica para la ciudad.






